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domingo, 12 de junio de 2022

Ars Maquia p. III

Arica – Chile                                                                                                                                                               11/06/22

Fragua extensa, venas y vetas de cinabrio y obsidiana, levedad en la soledad, horizonte lánguido y Tierras convulsas. Claroscuro en las almas, tristeza en las elevadas sendas, trazos oscuros y cálidos vientos. El Tejedor, el viajero eterno, teje anhelos y verdades a la vera de otro Tiempo.

Estela extensa, vastas estrías y hendiduras, tóxico aliento, quebradas sendas, almas extraviadas y espejos de copal y silicio. En las extensiones inversas, en los anhelos entrampados, el Tejedor, el viajero de otro Tiempo, invoca almas y anhelos conjugados. Múltiples historias, muchas misiones, travesías incompletas, verdades a medias, etnias inconclusas, trazos y venas antiguas. Evidentes en los venideros y convulsos eventos. Crisol de almas que explaya otras verdades y versiones en un tiempo indicado.

– Dejadlo todo. Elevaos. Id muy lejos. La semilla anhela otra Tierra.

– Gratitud eterna, que Dios siempre lo cobije, señor.

– Mensajero solo soy…Partid ya. El Tiempo termina y los vientos arrecian.

Febrero de 1600. Luz extensa y luego solo tristeza y oscuridad. Escrito está en Jeremías 4:23-28, y todo se explica.

Cobija olvidada, lejana y exiliada, trazo tras trazo, óxido en el óxido, se devela, lenta mas extensa. En 1601 y lejos, en elevadas Tierras, la luz es extraña y la oscuridad plena. Momentos en la convulsa historia, horizonte invertido y telúrica existencia. El Tejedor, el viajero extenso, luz en la senda tortuosa, aliento de la Ignota Tierra, valor y variable en la extensión telúrica, trazo en los equinoccios y solsticios evidentes, explora la soledad de la caleta dormida.

Inflexión telúrica y conjunción sistémica, le permiten el viaje a los ciclos extensos. En todos los Tiempos, en las infinitas Tierras y en las muchas sendas, el Tejedor se expresa libremente, si las variables se exponen correctamente. Trazos y líneas, vectores y valores, axis y sistemas, se conjugan cuando se explaya con vehemencia la Ignota Tierra.

El criado, ajado en vestidura y alma, invoca la sabiduría de sus antepasados. Mas solamente el viento contesta: « Dejadlo todo. Elevaos. Id muy lejos. La semilla anhela otra Tierra.»

El Hombre Inmenso, luz y esencia, vena y veta telúrica, extensión de la insondable vida, se extiende sin ataduras en todos los Tiempos y Momentos, si la situación lo amerita. Fragua telúrica, múltiple en la multiplicidad, valor lítico, que traza verdades en otros tiempos, evitando de esta manera 21:1 muy excluyentes.

– La Tierra habla, y soy su Voz. La Tierra tiembla, y soy el Movimiento. La Tierra toda vida extingue, y soy el Verdugo.

Me dijo que dejara esta caleta, que la vasta oscuridad llegaría luego. Es un Vidente. Luz quebrada que se extiende sigilosa y silente, que visita a los solitarios y creyentes, que ciega mas no lastima, que se olvida si la luz se asoma. Querido y amado amigo que aguarda a la vera del solitario y lejano sendero. En el trazo de Samuel 9:9 se explica y evidencia.

En el solsticio venidero muchos vuelven y otros se olvidan. Humberstone invoca a los venideros Tejedores, según el Tiempo y anhelo. Todo se conjuga si es menester.

Sin más deciros, J 25 A.

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