Arica
– Chile 09/11/15
“Vuelvo, una y otra vez vuelvo a los sitios y
sendas que surqué. Me refugio en el ayer, para olvidar momentos aciagos.
Fugitivo, inmerso en tiempos
caducos, anhelando lo que ha sido, sin regreso, atrapado en la materialidad. Aislado
mas no confuso. Un no nato, pero patente. Egoísmo sin par que no ceja.
Insensible, sin letargo ni
solidaridad. Poco me importa la futura extinción de la humanidad.
Se extinguirá para que otros regresen,
para que otros recuerden, para que otros se extiendan en un lejano y extenso firmamento.
Tuvo la oportunidad de trascender pero
la desaprovechó. Tuvo todo y todo extravió.
No siento tristeza, solamente
resignación. Todo, se olvidará todo. Nada existirá en el por-venir. Nada
quedará en la Memoria de la Tierra.
Detesto mi Linaje. Me resigno y amparo
en su final. Es lo que ha sembrado. Justa retribución por tantos anhelos
errados.
Pero
me resisto al olvido y regreso al ayer. Recorro veredas antiguas y trazo sendas
hacia ningún lugar. Me vuelvo ayer para resistir lo que vendrá.
No nato que se proyecta en otras
almas y Tiempos, para evadir lo aciago, lo que es imposible torcer, lo que me
impide olvidar.
No nato, inmerso en mis ayeres, que
rehúye lo venidero, resignado por resignación, que surca una y otra vez Tierras
que ya no existen.
Derivado y a la deriva, proyecto
anhelos que jamás se cumplirán.”
Pero
se puede destorcer lo que se ha torcido. Se pueden olvidar algunos Tiempos y
reescribir algunas memorias si es menester. Un ajuste, un enclave, una voz, una
memoria o algo más son claves para evadir algunos tiempos aciagos.
Seguid,
en estado y en misión, para que algunas historias se rescriban, algunas
memorias se rescaten y algunos extraviados regresen.
Un
Tiempo se aísla si se anhela. Infinidad y Tiempos permanecen. Tiempos aislados,
atrapados en un momento o en una Tierra.
“Otra vez miro el reloj, 7:23 señala. Redacto
mis memorias y siempre me extravío en el 2023. Algo olvido mas siempre lo
recuerdo en el ahora.”
Analizad
y meditad, mientras algo aguarda y se extiende.
Sin
más deciros, J 25 A.
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