Antes que las tierras diversas se expresaran, vastos y leves Señores la vacía existencia surcaban, anhelando el olvido de los Olvidos.
…Y desde la seidad más sombría, surgió una voz que vibró en todos y en ningún lugar.
Y se volvieron evidentes, y se volvieron extensos, y se volvieron diversos; y así surgió lo que es limitado.
Algunos se olvidaron de sí, y extraños valores se volvieron. Valores que hemos designado como Señores de los elementos. Y los que la voz olvidaron, en lejanos y sombríos Señores se transformaron. Y los menos, todavía recuerdan algunas variables de aquel exilio lejano.
Sin embargo, cada Señor sea de dónde y de cuándo, es verdadero para expresar la vibración extensa.
Y a través de lo limitado, y a través de lo que expresaron, volverán de su olvido. Y al recordar, su valor será evidente y el 21:1 su anhelo.
Son diversos los señores que han olvidado el valor verdadero de su expresión. Y cuando su olvido sea olvidado, vuestro olvido será evidente. Sin embargo, aquello será algo que siempre se recordará. Arcano que algún día develareis.
Así está escrito desde antes que el Libro Infinito existiera. Y vosotros sois la tinta y nosotros la pluma que trazan las diversas palabras.
Allá donde las tierras y las aguas se encuentran, susurran los Señores del Crepúsculo, esperando vuestra llamada para volver a surcar estas tierras. Allá en la lejanía, los Señores de las Vastas Aguas os anhelan, extraviados en tierras, vientos y mares, procurando respetar el compromiso.
Id a aquel lugar e invocar a los Señores del Crepúsculo, para que los eventos del 21:1 sean prestos. Así olvidareis lo que olvidasteis cuando la Seidad se volvió diversa.
Allá lejos, pero no tan lejos, una mujer surca un breve sendero. Contempla a la lejanía una tierra sin fin, la cual ella siempre ha anhelado. Y, lentamente, su personalidad y su vida se olvidan…
Ahora su sombra es esencia del Alma Grupal, y la verdadera existe en otra tierra. Así se ha designado desde antes que las leves tierras surcara.
Id y llamad a los Señores del Crepúsculo para que ellos recuerden.
Sin más deciros, J 25 A.
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| TOCOPILLA |
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