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jueves, 29 de marzo de 2012

Yggdrasil p. II

Arica – Chile                                                                                                                                                              24/03/12

Yggdrasil las diversas y difusas tierras enlaza. Yggdrasil es aquel valor que sólo aquellos que se olvidaron, recuerdan después de cada 2:11. Así todas las eras y verdades se yerguen cual sombra extensa en aquel solitario territorio donde Yggdrasil se extiende.

Y a otras tierras iréis cuando vuestra verdad se vuelva savia de Yggdrasil. Así vuestras almas y sentencias surcarán otros vientos y otras tierras de extrañas mareas.

Seguid en los diversos senderos que el 12 + 1 traza, y así todos los valores que Yggdrasil delinea vuestros serán.

Y cuando ya el alma de Yggdrasil no os abarque, olvidados seréis. Y vuestra voz, verdad y existencia ya no se recordarán. Y los venideros senderos se escriben con valores que jamás han existido.

Y todo aquel valor que Yggdrasil sentencia, existe en el alma del Señor de los Axis. Por tanto, evidente será, y al ser evidente, limitada será su evasión.

Así todo valor que se evidencia, sea de la variable que sea, es limitado mientras sea savia, sombra y voz de Yggdrasil.

¿Y si un alma o sentencia aquella verdad trascendiera? No existiría en el alma de Yggdrasil, y su origen olvidado sería.

¿Y qué hay de aquellas sentencias o almas que surcaron senderos quizá limitados, quizá torcidos, quizá inversos con aquel valor que se evadió? Jamás recordarán a aquel que se extravió, porque jamás en sus vidas existió.

Así el olvido se requerirá cuando otros valores y senderos se extiendan más allá de Finis Terrae y más allá de la extensa Melancolía.

Varios de los vuestros se han olvidado y otros se han recordado. Se olvidan para no recordarlos, y así Yggdrasil evaden. Y aquellos que se recuerdan es porque alguna verdad no han develado.

Así todo aquel valor de asistencia sistémica que surca las vastas y leves coexistencias, una verdad o valor ha de expresar. Y esa verdad o valor es alma y sentencia que lo atrapa en las diversas tierras.

Nadie que se recuerde, nadie que trace verdades, nadie que alguna religión limite, nadie que sea servicio y obra, ha olvidado a Yggdrasil. Si lo hubiera olvidado, sus verdades ya no existirían.

Aquel que surcó Judea, aquel que Ganesha expresó, aquella que feneció en Alejandría abrazada a un libro, aquel que la Kaaba trazó, aquellos y aquellas que algún valor expresaron en esta u otra coexistencia, todavía no se han olvidado. Y al no olvidarse, todavía la existencia los limita, y valores inconclusos evidencian.

Quizá esta verdad sea difícil de entender. Sin embargo, es verdad y sentencia. Y si es sujeta a duda, significa que existe y, por tanto, no se ha olvidado. Y al no olvidarse, lo dicho es verdadero.

Y más allá de Yggdrasil sólo existe lo que no existe, y más allá del más allá algo más existe. Y cuando vuestra alma y sentencia esa verdad evidencien, ya no será verdadera.

Quizá todavía no sea el tiempo de que esta verdad entendáis. Sin embargo, si ahora estas líneas y frases deslizan esta verdad, es porque algunos de vosotros la presiente. Y así presentís lo que se avecina.

Y dejemos a Yggdrasil en lo lejano, para evidenciar lo venidero, lo que es verdad y menos olvido.

El Teseracto se extiende en Nocturna y Melancolía en forma inconclusa, cruza Adviento y Mare Nostrum cual vago anhelo y se vuelve cada sendero que conduce a Yggdrasil. Y el Teseracto reclama a todos aquellos que el servicio requieren para evadir los senderos sombríos y las vías gastadas.

Algunos de vosotros surcaréis otras tierras, vientos y aguas para evidenciar axis y trazar leyendas. Quizá vuestra misión se requiera en esta u otra coexistencia. Cada uno debe estar en la tierra que se requiera. Quizá sea tierra del 21:1, quizá sea tierra del 2:31, quizá sea tierra del 2:11, quizá sea tierra del 20:12 o quizá sea otra tierra de valor arcano.

Sabréis a qué tierra vuestra alma y sentencia pertenecen, cuando el tiempo sea el señalado. No olvidéis que vuestra tierra es una de tantas. Y son tantas que incluso el Principito de contarlas quedaría extenuado.

Y así algunos de vosotros otros senderos surcaréis. Mas no olvidéis que si la muerte vuestra sentencia y alma reclama, es evidencia que esta tierra ya no os limita. Seguid donde se os requiera. Seguid, con la certeza de que lo que deba ser será. Y será ahora y no antes ni después.

Y la Segunda Alma todavía no concluye su Crepúsculo. Y cuando aquello acontezca, el Teseracto será más evidente y claro.

Y allá en lo lejano, allá donde existen almas extraviadas, allá donde una voz se seca, otro sendero trazaremos. Si la verdad es verdadera y si el tiempo es el señalado, lo venidero será expresado.

Allá existe un valor y un axis. Sin embargo, cuando aquel Cuerpo Grupal nuestra alma asimilen, la verdad será evidente.

Seguid, siempre seguid, sea en la tierra y coexistencia que se requiera. Savia que irriga la oscuridad y el fulgor de Yggdrasil.

Yggdrasil no os olvida, Yggdrasil os expresa, Yggdrasil os aguarda. Al él debéis servir, para que ya no os recuerde.

Y la realidad se hará trizas cuando aquello acontezca. Y sabréis que sois sólo bosquejos en una tosca pizarra. Y sabréis que vuestras verdades son sólo viñetas de una leyenda. Y sabréis que vuestros nombres se han escrito en la corteza de un antiquísimo árbol: Yggdrasil.

Sin más deciros, J 25 A.


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